Fundación ONCE ha presentado en Esade Forum Barcelona el Foro Inserta Responsable, un espacio de reflexión, participación e innovación social en Responsabilidad Social Empresarial y Discapacidad en el que las empresas y organizaciones comparten prácticas y experiencias en esta materia.
La presentación del Foro se ha realizado en el marco del desayuno titulado 'La RSE-D como elemento clave para la rentabilidad empresarial' en el que han participado el vicepresidente ejecutivo de Fundación ONCE, Alberto Durán; el director ejecutivo del Área Comercial de Repsol y consejero delegado de Repsol Comercial de Productos Petrolíferos, Pascual Olmos y el director de Corporate Excellence, Juan Cardona.
Alberto Durán ha asegurado que si algo bueno tiene la crisis es que ha hecho que muchas más personas con discapacidad se hayan puesto a buscar trabajo, lo que ha producido un aumento de su tasa de actividad. En cuanto al talento de estas personas, ha recordado a los empresarios que "el talento no siempre reside en un frasco bonito. Las apariencias muchas veces engañan y las personas con discapacidad son trabajadores tan válidos como el resto".
Por su parte, Sabina Lobato, directora de Formación y Empleo y Proyectos de Fundación ONCE, ha recordado que desde la puesta en marcha de los Convenios Inserta en el año 1998, en un contexto de creación de empleo con más dificultades todavía que hoy, se ha conseguido crear 6.600 empleos para personas con discapacidad, que se han podido incorporar en empresas importantes.
Para Pascual Olmos es fundamental "volver a lo básico, a la motivación, a lo que de verdad tiene importancia para las personas, un principio también aplicable al mundo de la empresa". En su opinión, "el dinero no es la clave de la felicidad porque, aunque las ganancias económicas son importantes al principio, lo fundamental en las sociedades desarrolladas es la forma de vida".
En este sentido ha hablado de la importancia de que las empresas cuenten con todos los miembros de la sociedad, también con las personas con discapacidad, como ocurre en Repsol, que tiene en la actualidad 398 trabajadores de este grupo social. Según Olmos, estas políticas repercuten en el resto de los empleados, ya que cuando ven el esfuerzo que las personas con discapacidad hacen para llegar al trabajo, valoran más lo que tienen. Por último, ha explicado que la integridad es el valor clave del siglo XXI entendida como la identificación de los valores del líder con los valores de la persona.
A continuación, Juan Cardona ha resaltado que la confianza "aporta cada vez más valor a las empresas" y ha añadido que "vamos a tener que acostumbrarnos a convivir con una inestabilidad sistémica, por lo que es necesario fortalecer la capacidad de adaptación para poder sobrevivir". Por ello, "las empresas tienen que estar más cerca de las necesidades de los públicos con el fin de darles una mejor respuesta".
En este sentido, ha explicado que la RSE es cada vez más importante y, dentro de ésta, es aún más relevante la inserción de las personas con discapacidad. Eleva los niveles de confianza de los empleados, quienes a su vez lo transmiten a los clientes