"El sello Bequal es necesario y exportable"

Carles Campuzano

Carles Campuzano, patrono de la Fundación Bequal y diputado del Grupo Catalán en el Congreso, ahonda en esta entrevista en las características del Sello Bequal, que acreditará el grado de compromiso de las empresas en materia de RSE y Discapacidad, además de analizar la situación de España en materia de accesibilidad.

¿Cómo surgió la posibilidad de ser patrono de la Fundación Bequal?

En mi condicion de diputado, desde hace años colaboro habitualmente con el sector de la discapacidad. Mi relación y conocimiento de esta realidad social, hizo que se me planteara la posibilidad de ser patrono, que acepté porque este proyecto es necesario.

¿Por qué es necesario esta acreditación?

Tiene dos cosas relevantes: por un lado, su especificidad en materia de discapacidad pues, cuando se habla de responsabilidad social en las empresas, se quiere abarcar muchas facetas y, en este caso concreto, se aborda la discapacidad en materia de empleo. Por otro lado, ha sido promovida por el propio sector.

¿Tendrá una implantación a nivel internacional?

Hoy en día, es importante que las cosas que se hagan sean replicables y este modelo es algo muy exportable porque refuerza el objetivo existente en materia de empleo entre personas con discapacidad. También se ha hecho un vídeo muy impactante que pretende generar conciencia entre los ciudadanos.

¿Cuál es la situación de España en materia de accesibilidad?

Contamos con una legislación avanzada muy equiparable a países de nuestro entorno pero en la práctica hay cosas que se deben mejorar sustancialmente, sobre todo en materia de empleo para las personas con discapacidad.

¿Iniciativas como este sello reflejan que algunos proyectos van más rápido que las leyes?

Las mejores leyes son aquellas que reconocen lo que pasa en la realidad y las peores son las que inventan una realidad. Y en este caso, la realidad es que hay demanda de generar oportunidades de empleo entre este colectivo. Contamos con leyes pero también son importantes las alianzas entre administraciones, sociedad civil y empresas.

¿Cómo cree que influirá la futura Estrategia de RSC en la que el Gobierno está trabajando en este tipo de políticas?
El movimiento de la RSC cuenta en España con una larga trayectoria, de cerca de 14 años, pero hay que pasar de las musas de teatro y concretar, además de asumir lo que marca la Unión Europea. Cuando hablamos de RSC, nos referimos a los impactos que tienen en la sociedad las acciones de las empresas, y eso hay que saber gestionarlo. Y el planteamiento del Ejecutivo es algo tímido.