La lucha contra el cambio climático podría suponer una "oportunidad de negocio" para los inversores

Cambio climático

La lucha contra el cambio climático podría suponer una "oportunidad de negocio" para los inversores y las instituciones financieras, según un avance de las conclusiones del Quinto Informe de Evaluación (AR5) llevado a cabo por el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC).

El documento, cuya versión final será sometida a debate por el IPCC el próximo 31 de octubre, subraya el rol "crítico" que puede jugar el sector privado a la hora de financiar la transición a una economía baja en emisiones de carbono.

En ese sentido, el IPCC ha revelado que el sector privado proporcionó el 62 por ciento de los 340.000 millones de dólares americanos (254.000 millones de euros) que fueron invertidos entre 2011 y 2012 para luchar contra el cambio climático.

Además, mantener el aumento de las temperaturas por debajo de los 2ºC exigiría una inversión en el sector de la energía de "entre 190.000 y 900.000 millones de dólares americanos anuales" (entre 142.000 y 672.000 millones de euros) hasta 2050, según las estimaciones del organismo, que añade que eso "beneficiaría" al mercado con un "reforzamiento de la seguridad energética y protección de las inversiones" contra los posibles efectos del calentamiento global.

Sin embargo, ha advertido de que la voluntad del sector privado a la hora de invertir en la lucha contra el cambio climático "depende de las políticas públicas" y ha asegurado que el 67 por ciento de las emisiones de gas invernadero están cubiertas en la actualidad por algún tipo de legislación o estrategia nacional, un "aumento considerable" con respecto a años anteriores.

"NUEVOS PUESTOS DE TRABAJO"
Por otro lado, el IPCC ha reconocido que desligar el crecimiento económico de las emisiones de gas invernadero podría ser una "amenaza" para los sectores e industrias ya establecidos pero ha destacado que los esfuerzos de mitigación "crearán nuevos puestos de trabajo" en tanto nuevos sectores como antiguos.

Se trata de una "transformación" del mercado laboral que exigiría "habilidades muy específicas" para un grupo de nuevos "trabajos verdes" en áreas como la producción energética y la construcción y edificación sostenible.

En esta línea, el organismo cifra entre 0,7 y 35,5 los años de trabajo que genera cada millón de dólares invertido en acciones de eficiencia energética en edificios con las que, según asegura, podría reducirse el consumo energético base "hasta un 60 por ciento".