Meliá retira de sus menús la aleta de tiburón para contribuir a preservar los ecosistemas marinos

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La Regional en Asia-Pacífico de Meliá Hotels International dejará de incluir aleta de tiburón dentro de los menús de sus restaurantes, así como en los eventos que se realicen en sus instalaciones, como parte de su compromiso "con la sostenibilidad, el medioambiente y el respeto por la biodiversidad" y con el objetivo de contribuir a preservar los ecosistemas marinos.

Así lo ha anunciado la compañía hotelera, que ha explicado que la iniciativa se enmarca en la Política Global de RSC y Sostenibilidad y "supone un nuevo avance en el consumo responsable de recursos" porque, tal y como consideran desde Meliá, "sólo es posible ser sostenible si se identifica el impacto de las operaciones sobre el entorno natural tanto a escala local como global".

Con la retirada de la aleta de tiburón como ingrediente, Meliá contribuirá, recalca en un comunicado, a la preservación y protección del "importante papel que cumple el tiburón en el mantenimiento del equilibrio de los ecosistemas marinos".

Y es que, según ha señalado, entre 70 y 100 millones de tiburones son cazados cada año para comercializar sus aletas. En varios países asiáticos son consideradas un manjar y en China son el ingrediente fundamental de una sopa tradicional.

"Los tiburones, como depredadores, mantienen las especies en la cadena trófica y son indicadores de la salud del océano. Eliminan a los ejemplares más débiles, mantienen el equilibrio con los competidores y garantizan la diversidad de especies. Además, facilitan los hábitats de algas y arrecifes de coral", aseveran desde la compañía.

En esta línea, apunta que su reducción o eliminación en los ecosistemas de arrecifes de coral permite que otros depredadores proliferen y se alimenten de herbívoros. La consecuencia directa de la reducción de herbívoros produce la expansión de macroalgas con las que el coral no puede competir, un hecho que conduce a que el ecosistema sea dominado por las algas y se ponga en peligro la supervivencia del arrecife.

"Con esta acción, una vez más, Meliá Hotels International pone de manifiesto su compromiso por reducir el impacto de su actividad y preservar la diversidad biológica de los destinos turísticos en los que opera, a través del respeto de su flora y su fauna", han remachado desde la hotelera.