"Nos sentimos muy orgullosos de nuestros trabajadores con discapacidad"

Elena Queipo

En 2011, Konecta y la Fundación ONCE firmaron un acuerdo de colaboración que contemplaba la incorporación progresiva a su plantilla de cincuenta trabajadores con discapacidad hasta 2015, aparte de otras iniciativas desarrolladas en paralelo. Tres años más tarde, uno antes de lo previsto, la multinacional española ha superado la meta fijada al contratar, como parte del Programa Inserta, a 52 empleados con algún tipo de discapacidad. En la actualidad, la entidad cuenta con un total de 224 personas con discapacidad contratadas.

¿Cuáles son los grandes ejes de la política de responsabilidad social de Konecta?Básicamente, las líneas que hemos seguido son primero, y teniendo en cuenta que somos una empresa que requiere de una tecnología punta con para trabajar con nuestros clientes, hemos tratado de hacer una tecnología accesible a la medida de éstos para conseguir, entre otras cosas, de fidelizarlos.
Por otra parte, teniendo en cuenta que el personal que tenemos es el que al final desarrolla la actividad, otro de los ejes ha sido la formación del capital humano. Para nosotros es muy importante que las personas que trabajan con nosotros estén formadas y tengan una capacidad de desarrollo importante en la propia compañía.
Y luego, otro de los aspectos importantes es la incorporación de personas en riesgo de exclusión. Somos grandes empleadores, tenemos posibilidad de dar trabajo de calidad, y por ello, uno de los principales objetivos de Konecta ha sido contratar a colectivos como mayores de 45 años, mujeres víctimas de la violencia de género y personas con discapacidad. Todo esto también implica que nuestras infraestructuras y oficinas sean accesibles por lo que la adaptación de puestos de trabajo es un tema en el que también trabajamos.

¿En qué medida el empleo de las personas con discapacidad es una prioridad de la compañía?Desde el momento en el que nació Konecta en el año 1999, incluso antes de que en el año 2005 constituyera su fundación hemos considerado que la contratación de personas con discapacidad era una posibilidad real, una prioridad. Prioridad que nació en 2000 y que desde 2005 se ha ido desarrollando de manera muy ordenada. Todos los departamentos de la compañía están absolutamente implicados en la contratación de personas con discapacidad.

En este sentido, ¿cuál es la experiencia de Konecta en la contratación de personas
con discapacidad? ¿Cuántas personas con discapacidad forman parte de su plantilla?
Respecto al año 2010, hemos incrementado el personal con discapacidad en un 40%. Y, ahora mismo, tenemos 224 personas. Somos un grupo de empresas, tenemos también un centro especial de empleo. Un 10% de las personas con discapacidad tienen un grado superior al 65%, un 36% son mayores de 45 años y un 70% son mujeres.
Hemos firmado un convenio con el Ministerio de Asuntos Sociales para la contratación de mujeres víctimas de la violencia de género, con el compromiso de confidencialidad. También estamos preparando la firma de un convenio con el Ministerio de Interior ayudar a las víctimas del terrorismo.

¿Cómo surge la idea de colaborar con Fundación ONCE para la firma de un convenio Inserta?Colaboramos con Fundación ONCE casi desde nuestros inicios porque para nosotros es un auténtico referente en materia de discapacidad. El convenio Inserta nos pareció una buena fórmula de colaboración porque Fundación ONCE tiene perfiles profesionales que a nosotros nos pueden interesar. Cuando empiezas a trabajar en este mundo y tratas de encontrar personas con discapacidad de un determinado perfil no es tan sencillo y en eso la Fundación es un aliado extraordinario. Y tanto es así que, un año antes de que finalizara el convenio hemos llegado al número de contrataciones que teníamos previsto.

¿Qué metas se propone tras el cumplimiento de los objetivos de este acuerdo un año antes de lo previsto?Las metas son renovar el convenio y, sobre todo, mantener el empleo de estas personas. Este es el éxito total de la inserción. De hecho ya tenemos muchas personas que llevan tiempo con nosotros y estamos muy orgullosos.

¿Qué opinión le merecen los trabajadores con discapacidad?, ¿responden igual que el resto de empleados?La experiencia ha sido completamente positiva. Los inicios nunca son fáciles. Al principio todo el mundo tiene dudas al empezar a trabajar con personas con discapacidad porque se preguntan cómo deben comportarse. Hemos trabajado en ello, con los mandos intermedios, con los coordinadores. Hemos dado charlas para explicar cómo vencer esas dudas y luego la experiencia diaria, ha ido venciendo los prejuicios.
Gracias a eso creo que hemos conseguido una gran estabilidad en la compañía porque, una vez superado ese periodo de adaptación que todo el mundo requiere, las personas con discapacidad se integran perfectamente y trabajan en igualdad de condiciones e incluso con más compromiso.
En momentos de repunte de la actividad hemos tenido trabajando hasta 40 personas con discapacidad auditiva en una compañía como la nuestra en la que el teléfono lo es todo. Además hemos hecho cursos de lengua de signos para poder interactuar con ellas.

¿Cómo animaría a las empresas que aún no lo hacen para que contraten a personas con discapacidad?
Es un tema que hay que tomar de manera profesional. No se trata de caridad, tiene que ganar la empresa y tiene que ganar la persona que entra a trabajar. Para ello, hay que contar con buenos colaboradores, como Fundación ONCE. Además, tiene que haber una sensibilización previa y contar con entidades que te ayuden para facilitar los perfiles que requiere el empresario. No se trata de crear un puesto ad hoc, tiene que ser una realidad y tienes que tener a una persona que se pueda incorporar a él. Por lo tanto tiene que tener una formación y tiene que cumplir una serie de requerimientos.
En eso, el convenio Inserta es fundamental, porque esa labor de selección la realiza Fundación ONCE y nos proporciona el perfil de la persona que se puede adecua a nuestras necesidades.